Armonizadores

La Shungit es una piedra “inteligente” que sabe adaptarse a la persona que la usa, a sus necesidades. Además, actúa con suma rapidez al entrar en contacto con nosotros.

Como la Shungit es una piedra relativamente nueva para nosotros (la presentamos en España en diciembre del 2010), aún hay muchas propiedades y usos por descubrir, pero a continuación explicaremos unos cuantos, que están detallados en el libro Shungit, extrema protección.

• Alivio de dolores localizados al entrar en contacto con la piedra. Si tienes un dolor de cabeza o de estómago, por ejemplo, sitúa una Shungit (cualquier formato vale) en el punto donde sientes la molestia y notarás como en pocos minutos desaparece. Esto no es porque la piedra en sí quite el dolor, sino que pone en funcionamiento nuestro mecanismo interno para la auto sanación celular.

Hay que tener en cuenta que si hace mucho tiempo que sufres una determinada dolencia, la Shungit necesitará más tiempo para actuar. Es bueno que te pongas un esparadrapo, tirita, venda o lo que tengas a mano para enganchar la piedra a la zona afectada.

Hay casos en los que se ha comprobado especialmente el efecto de la Shungit al depositarla en el punto de dolor, como en la fatiga de los ojos, los calambres en el estómago, digestiones difíciles, dolores articulares, quemaduras ligeras y dolores de espalda. Cuanto más reciente sea la dolencia, más rápidamente actuará la piedra. Por ejemplo, en dolores agudos, golpes, contracturas, se suele notar mejora al poco tiempo de ponerse en contacto con el mineral. Los dolores más antiguos necesitarán más tiempo de exposición, pero en cualquier caso se notará una rápida mejoría.

Es importante remarcar que la Shungit no reemplaza ningún tipo de tratamiento médico, así que en ningún caso puede usarse como sustitutivo.

• Reequilibrio energético. La Shungit tiene propiedades para reequilibrar nuestra energía, pero para ello es necesario utilizar a la Esteatita, su Yang particular, su polo opuesto. La Esteatita se encuentra en Carelia, la misma región rusa en la que descubrimos la Shungit. Sus características son básicamente la resistencia al calor y la acumulación y conducción térmica (fabrican sartenes con Esteatita). Combinando estas dos piedras, obtendremos una potente herramienta de reequilibrio energético.

Para los terapeutas, la Shungit es un excelente medio para preparar sesiones de terapia y también para limpiarse al finalizar.

• Meditación. Usar la Shungit para meditar es muy sencillo, se trata de coger un trozo de este mineral en cualquiera de sus formas, ponérselo encima del charcra del tercer ojo (entrecejo) y estirarse de la forma más confortable posible, sin cruzar las piernas, ni tensar ningún músculo. Es recomendable no usar almohada para que la cabeza esté en armonía con la columna vertebral. Si es posible, añadir un segundo trozo de Shungit entre las piernas, a nivel del chacra raíz. El trabajo nos ayudará a reencontrarnos con nosotros mismos.
•  Escudo protector sobre todas las fuerzas perturbadoras activas. Eso hace que las ondas electromagnéticas y todo tipo de energía polucionante ya no nos pueda afectar porque son aspiradas por el agujero negro que produce este mineral (el fenómeno se llama adsorción). Además, también tiene lugar un anclaje muy profundo en la tierra, que ayudará a que se realineen nuestros cuerpos energéticos.
•   Radiónica. Se puede utilizar en temas personales o para ayudar a los demás. Nosotros vendemos el potenciador de los 72 Ángeles de la Cábala, junto con una pirámide de 5x5cm para colocar en medio, pero se puede utilizar un triple decágono cualquiera colocando trozos de Shungit a cada uno de los lados. Este pequeño montaje te permite en 15 minutos reactivar el tono vibratorio de los objetos y neutralizar malas energías. También puede situarse en el centro del decágono una fotografía de la persona a la que se desea ayudar o la nuestra propia. Este ritual también es útil para pedir deseos, escribiéndolos en el papel y situándolos en el centro del decágono. En cualquier caso, dejaremos a estos elementos actuar durante 21 días y después les daremos un respiro de un mínimo de 7 días para evitar saturaciones energéticas.

La Shungit tiene propiedades para reequilibrar nuestra energía, pero para ello es necesario utilizar a la Esteatita, su Yang particular, su polo opuesto. La Esteatita se encuentra en Carelia, la misma región rusa en la que descubrimos la Shungit. Sus características son básicamente la resistencia al calor y la acumulación y conducción térmica (fabrican sartenes con Esteatita). Combinando estas dos piedras, obtendremos una potente herramienta de reequilibrio energético.

Para realizar una sesión de reequilibraje, si somos diestros, la Shungit (negra) se cogerá con la mano izquierda y la Esteatita (gris) con la derecha. Si somos zurdos, convendrá invertir el orden y quien sea ambidiestro, puede elegir. Una forma de reequilibrarse mediante estos dos minerales sería, por ejemplo, sentarse con la espalda recta y sin cruzar las piernas, tomar una piedra en cada mano (según hemos comentado antes) y dejar las manos reposando sobre las piernas durante 15-20 minutos.

Los beneficios de este reequilibrio energético son los siguientes:

• La mente se calma, lo cual puede ser favorable en procesos de meditación o concentración.
• La circulación y el sistema neurolinfático se regulan.
• El sistema inmunitario tiende a mejorar.
• El aura se limpia.
• Los sueños son más lúcidos y la intuición más aguda.

Es recomendable realizar un reequilibraje una o dos veces por semana, pero tampoco es necesario volverse esclavo de esta herramienta.

Para los terapeutas, la Shungit es un excelente medio para preparar sesiones de terapia y también para limpiarse al finalizar.